En la senda de la autocomplacencia
A la sastresa le gusta este poema porque le aporta la energía que a veces le falta para seguir adelante. Cuando el pasado, de forma imperceptible a veces, flagrante otras, se hace presente con su crudeza, no viene mal echar mano de la poesía para restablecer un cierto orden, aquél que sencillamente nos recuerda hacia dónde caminar. La sastresa ya no llora detrás del biombo chino, pero en las ocasiones de mayor soledad, las lágrimas amenazan con brotar...
'Poema de amistad', de Octavio Paz
No te aferres al pasado
ni a los recuerdos tristes.
No abras la herida que ya cicatrizó.
No revivas los dolores y sufrimientos antiguos.
Lo que pasó, pasó...
De ahora en adelante,
pon tus fuerzas en construir una vida nueva,
orientada hacia lo alto, y camina de frente,
sin mirar atrás.
Haz como el sol que nace cada día,
sin pensar en la noche que pasó.
Vamos, levántate...
porque la luz del sol está afuera!
'El misterio del agua azul (Beau Geste)', Percival Christopher Wren
-
'El misterio del agua azul (Beau Geste)', Percival Christopher Wren
Fantasmas. Muertos. Legionarios que a pesar de estar ya sin vida se aferran
a sus bayo...
Hace 2 años
3 comentarios:
Llorar de vez en cuando es bueno. Cuando acabas te sientes mucho mejor, como limpia por dentro... Al menos a mí me pasa. Soy una llorona. ¡Y a mucha honra!
lo de llorar venía por un escrito que hice hace nueve meses cuando se inició esta vorágine... (ver en diciembre, día 3, Tijeretazos bien pensados)
Publicar un comentario